Aitana abre las puertas de su disco más personal, íntimo y honesto: 'Cuarto Azul'
- News Bemol
- 6 jun
- 3 Min. de lectura

Con 19 canciones, una mezcla de emocionantes colaboraciones y una narrativa cargada de poder, Cuarto Azul marca un punto de inflexión en la carrera de Aitana
Tras la era de Alpha, Aitana regresa con su cuarto álbum de estudio: Cuarto Azul. Lejos de seguir una línea conceptual similar a la de sus discos anteriores, la artista presenta posiblemente su trabajo más sincero y personal, contando su historia con total honestidad y mostrando todas sus luces y sombras. Desde el primer tema hasta el final, la cantante expone al público su vulnerabilidad, pero también sus momentos de empoderamiento, en una travesía emocional que fortalece la conexión con sus seguidores.
El álbum arranca con un relato de tristeza y rabia, fruto de una ruptura sentimental precedida por un profundo desgaste emocional. Canciones como 6 de febrero, Segundo Intento o una de las más dolorosas, Cuando hables con él, permiten ver sin filtros los sentimientos más puros de la artista. Aitana canta al desamor, a la autocrítica, al dolor, a los complejos y a los momentos difíciles, dejando claro que no busca la perfección, sino la verdad. Esta primera fase de su trabajo muestra una madurez emocional nunca antes vista en su carrera.
A lo largo de este trabajo, observamos cómo cada canción se convierte en un diario emocional que recoge lo vivido por Aitana durante los últimos años, combinando momentos de incertidumbre, emoción, confusión y pérdida, pero también dejando espacio para el crecimiento personal y la esperanza. En temas como Luz de la mañana o En el centro de la cama, se percibe el inicio de un renacer emocional, marcando la separación entre la oscuridad y una nueva etapa vital. La producción mantiene una base pop sólida, pero introduce matices que van desde el pop británico hasta el alternativo y el techno suave, ampliando su universo sonoro sin perder cohesión.
La segunda mitad del álbum se define con una palabra: resiliencia. Con canciones más desenfadadas y coquetas como Sentimiento Natural, Conexión Psíquica o Superestrella, Aitana recupera su esencia lúdica y libre, sin abandonar la profundidad emocional del proyecto. Entre tanta intensidad, también hay espacio para la nostalgia con humor y la ironía, como en Ex, ex, ex o La chica perfecta, esta última en colaboración con Alaska, donde la artista reflexiona con desenfado sobre cómo ha ido rompiendo moldes y expectativas sociales a lo largo de su carrera.
El lanzamiento vino precedido por una listening party en el Movistar Arena madrileño, donde miles de fans tuvieron la primicia de este viaje emocional en un evento sin precedentes. Aitana compartió, de manera simultánea a la escucha del disco, los procesos creativos detrás del trabajo, mostrándose más cercana que nunca y reafirmando tanto su conexión con los seguidores como su madurez artística. El impacto fue inmediato: el álbum rompió récords en plataformas como Spotify y Apple Music, y Cuando hables con él se posicionó rápidamente como una de las canciones más escuchadas del país.
Cuarto Azul se ha convertido en algo más que un disco: es una declaración de identidad. Aitana deja atrás la máscara del pop “perfecto” para abrazar y dar luz a su verdad, sus emociones y su evolución, tanto como mujer como artista. Con este proyecto, no solo reafirma su lugar como la voz de una generación, sino que redefine lo que significa hacer pop en español: narrar lo auténtico, presentar lo vulnerable y demostrar que sentir no es una debilidad, sino una fortaleza.
¿Siguiente parada? La Metamorfosis Season, una gira de estadios que comenzará el 19 de julio en el Estadi Olímpic Lluís Company en Barcelona y seguirá con los ansiados conciertos los días 30 y 31 de julio en el Estadio Riyadh Air Metropolitano en Madrid.
Comentários